Hace poco más de un año editábamos Instinto de Superviviente, novela de temática zombi escrita por Darío Vilas. La novela tuvo una aceptación sobresaliente, logrando ser finalista en los I premios Pandemia y en los I premios Sciworld, así como acarreando numerosas críticas positivas. Sin embaro desde el principio el autor dejó claro que Instinto de Superviviente era el primer paso de una carrera en tres etapas, una trilogía formada por tres novelas que se podrían disfrutar de manera independiente pero que, en una lectura conjunta, formarán una única historia o, al menos, el gran grueso de los acontecimientos que el autor ha decidido contarnos en esta ocasión.
Recordaba ahora todo esto porque el segundo lado de este triángulo verá la luz en diciembre, con el título de Lantana, y será una rara avis dentro de herogéneidad ya de por sí existente en la Línea Z. Lo será porque transcurre antes de los sucesos narrados en la anterior novela y porque contará lo que lleva al mundo a sumergirse en el apocalipsis zombi que ya conocimios. Un ejercicio de estilo que obliga a Darío a un tour de force creativo en el que ha de mantener el interés y la emoción del lector a lo largo de las páginas de la novela, a pesar de que como es obvío los zombis no tendrán apenas peso en una obra que, en contra de lo habitual, transcurre casi por entero en los momentos anteriores al que suele ser el punto de partida habitual en muchas obras Z.
Aún no os voy a enseñar la portada de Lantana pero, para abrir un poco vuestro apetito lector, sí que os dejaré ver esta composición rápida realizada por José Luis Cantos. Disfrutadla...
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