Hace unos días presentamos, como ya os comenté aquí, la sección Enfants Terribles del Ficx. Una sección que me gusta especialmente por lo satisfactorio de acercar el cine a los jóvenes, más aún ahora que cada vez nos quedan a todos menos salas en las que experimentar realmente la magia del cine. El otro día me preguntaban en una entrevista si podía resumir con una única palabra lo que esta sección significaba para mí y lo tuve muy claro: CONFIANZA.
Confianza en que nuestros jóvenes están mucho más preparados para desarrollar pensamiento crítico ante lo que ven de lo que se suele pensar, faltando solamente que los adultos les demos las herramientas necesarias para que lo puedan construir. Confianza en que el cine es un medio tan maravilloso que debe aprender a amarse desde pequeños si queremos tener buenos espectadores el día de mañana. Confianza en que la excesiva sobreprotección a los jóvenes es contraproducente y que es mucho mejor ver películas que fomenten el debate sobre realidades con las que lidian muchos jóvenes día tras día sin poder cambiar de canal. Confianza en que los jóvenes disfrutan ese otro cine que generalmente no pueden ir a ver a las salas comerciales. Y un largo etcétera que se resume siempre con esa palabra... CONFIANZA.
Con esa idea hemos escogido once películas que os comento a continuación, siempre la primera vez que se pueden ver en nuestro país y siempre proyectadas en versión original con subtítulos...
Para los más pequeños hemos programado dos largometrajes con la animación como protagonista. Dos películas espectaculares con las que pretendemos que los niños queden enamorados de la experiencia y estén deseando volver al cine lo antes posible, al tiempo que van descubriendo sin darse cuenta algunas obras literarias del escena europea. Con la superproducción rusa de animación Snow Queen, dirigida Maxim Svenshnikov y Vladien Barbe, descubrirán el cuento clásico de Hans Christian Andersen del mismo nombre, mientras que la película familiar alemana The little ghost, que dirige Alain Gsponer, conocerán la obra del escritor Ottfried Preussler, en una película de factura y producciones impecables donde nuestro simpático y fantasmagórico protagonista está hecho con animación dentro de un entorno completa real.
Ya para niños a partir de ocho años tenemos dos películas familiares que aúnan entretenimiento y una impecable factura, con información interesante para debatir. Por un lado está la película austriaca A horse in the balcony, de Hüseyin Tabak, y por otro la coproducción suizo-alemana Clara and the secret of the bears, de Tobias Ineichen. La primera nos cuenta la historia de unos amigos que acaban viviendo diversas aventuras para salvar aun caballo de acabar en el matadero a causa de una deuda de su propietario con los gangster, todo ello aderezado por un joven protagonista con síndrome de Asperger (uno de los desórdenes menos diagnosticados), lo que es un ocasión perfecta para enseñarle a los asistentes en consiste este trastorno.
La segunda es una historia de magia y misterio que nos cuenta la aventura de una niña que, tras regresar al campo para vivir con su madre y su padrastro, comienza a tener visiones del pasado relacionadas con una bruja quemada hace más de cien años y con los osos que campan por la zona. Un canto a la necesidad de encontrar el equilibrio entre la naturaleza y la civilización.
Las dos siguientes películas, ya a partir de 10 y de 12 años respectivamente, pese a ser muy distintas entre sí giran alrededor de una idea común: que con perseverancia e imaginación se pueden cambiar las cosas. La primera es la película británica Streetdance All Stars, dirigida por Ben Gregor, y la segunda es la australiana Satellite Boy, de Catriona McEnzie. La primera nos acerca a un centro de ocio juvenil apunto de ser derribado para convertirlo en un aparcamiento y de dos avispados amigos, Ethan y Jaden, que por distintas circunstancias deben salvarlo convocando un concurso de talentos y formando su propio grupo de baile urbano.
La segunda es la historia de un chico que vive con su abuelo en lo que fue un cine en medio del gran desierto australiano, que ve su vida cambiada cuando les comunican que el lugar será derruido para edificar. Lejos de aceptarlo, y en compañía de su mejor amigo, deciden iniciar un viaje a través del desierto con la idea de convencer a la constructora de que de marcha atrás al plan. Esta película fue una de las triunfadoras de la sección de jóvenes en el pasado Festival de cine de Berlín.
Los dos siguientes títulos, a partir de 12 y de 13 años, también tienen un tema en común pese a sus muchas diferencias: que una pequeña mentira puede complicarte mucho la vida, aunque sea de dos estratos sociales tan diferentes como los de los protagonistas de las dos cintas. La primera es la película de Letonia Mother I love you, dirigida por Janis Nords, y la segunda es la francesa La cité rose, de Julien Abraham. La primera nos cuenta la historia de un joven e introvertido chico que pierde su saxo a pocos días de un concierto con la banda de su colegio, cuando se había colado para jugar en la casa que limpia la madre de su mejor amigo, entrando en una espiral cada vez más complicada de la que les imposible salir. La película afronta el tema de que sucede en esas edad en la que crees que ya puedes apañarte solo de todo, si estás en un lío en el que necesitas inevitablemente la ayuda de un adulto para salir.
La segunda nos lleva a un barrio del extrarradio de París donde conviven inmigrantes de varias nacionalidades y culturas, un lugar donde la línea entre el mal y el bien no está siempre clara. Allí se nos presenta este vibrante retrato urbano de la vida y la muerte en las barriadas parisinas que sin duda podría ser extrapolable a cualquier país.
La vie nous appartient, película austriaca para mayores de 14 años dirigida por Alex K. Lee tendrá su estreno mundial en nuestro festival, hasta el punto de que incluso sus actores se desplazarán a Gijón para verla por primera vez. Nos cuenta la historia de dos chicos, Sarah y Phillippe, que tras mantener largo tiempo conversaciones únicamente por internet, compartiendo su sentimiento de rechazo y marginación por parte del mundo que les rodea, deciden quedar en persona para hacer una excursión a las montañas austriacas y poner fin, juntos, a sus vidas. Mientras el espectador se pregunta si cumplirán su promesa o se arrepentirán y no seguirán adelante con el plan, asistimos a una amplia conversación entre ellos que plasma, perfectamente, muchas de las inquietudes de los algunos jóvenes de hoy en día.
Los dos últimos títulos de la lista, ya para mayores de 15 años, son de nuevo dos películas muy diferentes entre sí pero que también tienen puntos en común. La canadiense Sarah préfère la course de Chloé Robichaud y la polaca Baby Blues de Kasia Roslaniec. En ambos casos nos encontramos con protagonistas femeninas y jóvenes que luchan por llevar una vida normal a pesar de que su realidad parece impedírselo, en un caso por el sacrificio que exige dedicarse al deporte de alto nivel y en otro por lo exigente de haber tenido un hijo. La primera nos habla de la tímida Sarah cuya única pasión verdadera es correr, algo que parece ir muy en serio cuando decide arriesgar su cómoda vida ante la seria posibilidad de ser elegida para el equipo nacional de su país.
La segunda fue la otra ganadora del pasado Festival de Cine de Berlín en lo que a películas para jóvenes se refiere. En ella conocemos a una alocada adolescente, sin trabajo y con problemas familiares y con un atolondrado novio, que está decidida a cuidar de su hijo cuando apenas es capaz de cuidarse a sí misma. Una película ácida, nada complaciente, que habla sin rodeos y con un estilo directo de un problema real para muchos jóvenes, en un mundo donde aceptar las responsabilidades no suele ser fácil. Una historia, construida a partir de una noticia real, que asegurará el debate.
Una selección variada, como podéis ver, que contará con la presencia de varios de los directores y protagonistas de las cintas, que participarán en presentaciones, encuentros y debates con los jóvenes asistentes.