Cuando, sabedores de que muchas de las propuestas más vanguardistas e interesantes del actual panorama cinematográfico estaban realizándose en el campo de la animación, decidimos en el 2012 crear la sección Animaficx dentro del Festival Internacional de Cine de Gijón, sabíamos que esta iba a tener una rápida aceptación pero lo cierto es que incluso nosotros mismos nos vimos sorprendidos por su excelente implantación dentro de la programación de un festival del que ya se ha vuelto esencial. Una selección de lo mejor del panorama internacional, que se puede contar entre las más importantes de un festival no especializado en cine animado, que se realiza con el firme objetivo de que la sección represente un amplio vistazo a las muchas posibilidades, narrativas y estéticas de la animación.
Vamos a ver, a lo largo de tres posts, las películas que forman parte de esta sección, comenzando aquí por cuatro de ellas. La primera es un estreno nacional de la película Cafard de Jan Bultheel, que además estará en Gijón para presentar su película...
Resulta
sorprendente, y es una muestra de talento por parte de Jan Bultheel, que con la
enorme cantidad de producciones de género bélico que pueblan la historia del
cine, aún seamos capaces de encontrar espacios desconocidos donde, pequeñas
historias reales, siguen esperando a que nos las descubran. Es el caso de la
historia de Jean Mordant, el protagonista de Cafard.
Nos
situamos en pleno desarrollo de la Primera Guerra Mundial. Mientras Jean
Mordant se encuentra de viaje alzándose con el título de Campeón del Mundo de
Lucha, en su Ostend natal su joven hija Mimi está siendo asaltada por varios
soldados alemanes. Enfermo de odio jura
venganza y se enrolla en la prestigiosa ACM, la primera división motorizada de
la historia, dispuesto a combatir las tropas germanas en el frente. Poco podía
sospechar que esa decisión le embarcaría en un dramático viaje por varios
continentes, tratando de regresar a casa, que cambiaría totalmente su forma de
ver el mundo.
Una
de las mejores películas bélicas de los últimos años, basada en hechos reales,
que utiliza las infinitas posibilidades de la animación al servicio de un
público adulto.
Otro de los títulos que podremos ver este año es The magic mountain de Anca Damián, que también vendrá a Gijón a presentárnosla...
Adam Jack Winkler fue un montañero,
fotógrafo y muchas cosas más, pero sobre todo fue un soñador que quiso hacer
del mundo un lugar mejor, lo que le llevó a abandonar su Francia natal para
luchar junto al comandante Massoud en Afganistán contra los soldados
soviéticos. Anca Damian vuelve a contarnos una historia de heroísmo, de un
personaje no suficientemente conocido, utilizando el documental y la animación
para hacerlo, algo que ya había realizado con sobresaliente éxito en su
anterior película Crulic (que ya compitió en Animaficx en el 2012). Y de nuevo
vuelve a hacerlo demostrando unos recursos tan variados (2D, 3D, aguadas,
gouache, etc…) como originales y acertados, que logran mantener una
indiscutible belleza plástica en cada toma. Premiada en Karlovy Vary, entre
otros festivales, la película cuenta con la música del compositor Alexander
Balanescu y la inolvidable voz, en su versión francesa, de Christophe Miossec.
La tercera película de la que hablaré hoy en esta entrada es The Boy and the Beast, del maestro japonés Mamoru Hosoda que, aunque muy breve, también hará una visita al Ficx este año...
La
última película del director japonés Mamoru Hosoda, The boy and the beast, nos
presenta a Kyuta, un niño solitario de Tokyo que acaba encontrando
accidentalmente el paso a un mundo repleto de criaturas sobrenaturales. En ese
fantástico mundo entabla una relación especial con Kumatetsu, una de las
poderosas bestias que lo moran, que acaba aceptándolo como aprendiz y
convirtiéndose en su entrenador y guía espiritual a pesar de que allí los
humanos no están demasiado bien considerados. Una decisión que acabará
cambiando, y marcando para siempre, tanto al maestro como al alumno.
La
película, una aventura apasionante que no da respiro al espectador desde el
primer al último minuto, tiene presentes todas las claves del cine de Hosoda
(la importancia de la familia, la irrupción del elemento fantástico en el mundo
real…) que le han convertido en uno de los nombres esenciales del cine japonés
contemporáneo.
The boy
and the beast ha sido la primera película de animación en competir por la
Concha de Oro en el Festival de cine de San Sebastián.
Hasta aquí un primer bloque. Mañana otros tres títulos de la sección
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